¡Socorro!
ACTUALIZO OTRA VEZ: Haced el favor de ser educados, que me han llamado de comisaría otra vez. A ver si podemos seguir con el tema sin insultar a nadie.
ACTUALIZO: Me llaman de la comisaría: Elisabeth Nogales me ha denunciado.
Un disgusto para acabar el 2011. Revisando la web de El Economista descubro una ilustración que me suena bastante.
Juraría que son unos pictogramas que dibujé para una empresa en la que trabajé alrededor de 2003. Fue mi primer trabajo como diseñador gráfico y no era muy brillante. Lo compruebo en mi portafolio de la época gracias a archive.org y, efectivamente, son los mismos iconos copiados y pegados con alguna manipulación.
Escribo primero a la autora, Elisabeth Nogales, no vaya a ser que los hubiera sacado de otro sitio. A continuación reproduzco el intercambio de emails.
Hola Elisabeth, soy Puño y también soy ilustrador. Te escribo porque he visto esta ilustración tuya y me gustaría saber de dónde sacaste los iconos que la componen.
Hola Puño!! se que eres ilustrador nos conocimos una vez pero bueno de eso hace mucho tiempo......
Pues la verdad no se de donde lo saque hace mucho tiempo que hice esa ilustración, imagino que la fusilaría de internet, luego recuerdo que los modifique, pero
poco más te se decir.
Porque lo preguntabas?
Un saludo y Felizzzzz Navidaddddd!!!
Pues es que lo que fusilaste es un trabajo mío. Vamos, no es que esté fusilado, es que hiciste un corta y pega. Y además en un artículo sobre derechos de autor.
Que te puedo decir, que lo siento y que no era mi intención, por eso que ni recuerdo de donde lo saque, joer vaya coincidencia!!! Bueno es que no se que decir, me muero de verguenza la verdad.
Sorryyyy meeeeeee : (
¿No era tu intención copipegar la ilustración de otro? Encuentro una desfachatez que cobres por una ilustración que no has hecho tú. Además tengo entendido que fuiste jefa de ilustradores en El Economista. Y no es coincidencia, evidentemente si plagias una ilustración hay un autor detrás de ella que tarde o temprano va a enterarse.
Bueno te he pedido perdón, y no te he faltado al respeto, si lo hice no sería con esa intención y no vería que era tuya. No me gusta joder a la gente, pero si vives en el mundo real a mi tambien me han fusilado ilustraciones y no voy enviando mails de cortesia.
No me conoces, no sabes nada de mi ni de quien soy , asi que no te pases Don Puño.
Sabes yo había oido hablar maravillas de ti,me gustaba tu trabajo, en fin ....sin palabras estoy.
Saludos, Elisabeth.
Llegados a este punto, evidentemente dejo de responder y paso a escribir al Economista, explicándoles que mi mayor problema estriba en que yo he realizado unos iconos para uso exclusivo de mi cliente y que compromete absolutamente mi rigor profesional y un contrato de exclusividad que firmé con ellos en 2003. De El Economista no he recibido respuesta aún.
Al final uno se siente impotente, amenazado, ignorado y sobre todo idiota porque una compañera saca beneficio económico del trabajo que yo hice.
Y ahora, ¿qué hago?